La bandera rojinegra del anarcosindicalismo surgió una vez más en las calles de Lisboa, como parte de las celebraciones del 1º de mayo. Anarquistas militantes identificados como pertenecientes a la Sección Portuguesa de la Asociación Internacional de Trabajadores (AIT) marcharon pacíficamente por el centro de la capital y calles adyacentes, mostrando pancartas, carteles y coreando consignas anticapitalistas.
En un juego claro del gato y el ratón con la policía, l@s compañer@s portugueses se presentaron en superficies comerciales que permanecieron abiertas en este día reivindicativo.