viernes, 15 de mayo de 2015

El soborno y la corrupción ha sido justificada por el 69% de los directivos españoles




Esto nos da una idea de la ética que rige en las empresas, dirigidas por señoritos cortijeros, enchufados y trepas, la misma ética que se traslada a los poderes del estado... malditos vividores. Claro, así se eliminan competidores rápidamente, se generan borregos y luego todo el día de mariscadas, juergas, regalos. Estilos y maneras del buen vivir, eso sí, con la tarjeta corporativa.

El soborno y la corrupción ha sido justificada por el 69% de los directivos españoles como práctica para generar nuevos beneficios de manera rápida. Así se desprende del informe sobre fraude y corrupción en 38 países elaborado por EY

Los datos en España superan a la media de Europa Occidental, donde el porcentaje se sitúa en el 35% y por encima también de países con mercados emergentes (61%). Además, esta percepción ha aumentado un 4% respecto a la registrada en España en 2013.

España es el segundo país de la Unión Europea, junto con Grecia, en cuanto a la generalización de la corrupción. En primer lugar se sitúa Portugal, con un 82% y, en el otro extremo, Dinamarca, con un 4%.

El 46% justifican los sobornos

El uso de sobornos como recurso para hacer negocios ha sido justificado por un 46% de los encuestados en España, si esto contribuye a la supervivencia del negocio. En esta línea, los preferidos son los regalos personales (34%), seguidos de los regalos relacionados con el ocio (31%) y de los pagos en metálico (16%).

Así las cosas, un 57% de los directivos está bajo presión para buscar nuevas fuentes de ingresos, contexto en el cual los mercados de alto riesgo, donde existe una mayor probabilidad de que se produzca prácticas de este tipo, han ganado protagonismo.

El 56% reconoce que 'maquillan' las cuentas

Asimismo, existen otros errores "justificables" a los que las empresas recurren de manera frecuente, ya que el 56% de los encuestados en España han reconocido que sus compañías a menudo "maquillan" la información financiera. En Europa Occidental, este porcentaje se sitúa en el 33%.

En este contexto, la práctica más habitual, aprobada por un 36%, consiste en negociar descuentos con los proveedores o retrasar el pago de facturas, que ha sido defendido por el 14% de los encuestados. Así, un 15% de los españoles ha afirmado que estas prácticas han tenido lugar en los últimos meses en sus empresas.