miércoles, 7 de enero de 2009

Manifestación

Sábado 13 de diciembre, a las 12 horas, en la Plaza Weyler, manifestación contra las jornadas de 65 horas, el paro, la precariedad, el Plan Bolonia... QUEREMOS VIVIR CON DIGNIDAD, NO COMO ESCLAVOS
Ante los inciertos tiempos que corren, alzamos la voz para gritar a los cuatro vientos nuestro rechazo a los recortes de derechos que como trabajadores y trabajadoras tanta sangre costó conquistar y una situación social en la que nos vemos convertidos en el eslabón más débil de la cadena capitalista. Eslabón que debe asumir todos los costes de la sinrazón neoliberal mientras que los verdaderos creadores de la actual crisis económica reciben todos los parabienes y gracias para que continúen manteniendo sus enormes beneficios e indecentes sueldos. De esta manera, con el dinero público de todos y todas se están sufragando las deudas especulativas de unos pocos. Años y años recortando las prestaciones por desempleo, los derechos laborales, las inversiones públicas en sanidad y educación, pues el Estado decía no poder hacer frente al coste de las mismas, privatizando todos los sectores públicos argumentando que era sinónimo de una gestión eficaz al mismo tiempo que los promotores de las privatizaciones recibían comisiones multimillonarias y privilegios de todo tipo. De repente ese mismo Estado es capaz de sacar una ingente cantidad de dinero público para hacer frente a las reclamaciones de la banca privada porque dicen que han reducido sus beneficios. Para el obrero y la obrera, no había dinero, para el banco, cheques en blanco. Trabajo precario, jornada laboral de 65 horas, privatización de la educación, listas de espera interminables, planes de vivienda pública inexistentes, carestía de la vida por las nubes, paro generalizado, esa es la realidad que nos toca vivir como habitantes de este país volviendo los niveles de pobreza a situación que creíamos superadas por el devenir de los tiempos. En este mundo tecnológico, los seres humanos no tenemos derecho a una vida digna pues no puede alcanzarse esta dignidad si no podemos llegar ni a fin de mes, teniendo que recortar drásticamente los gastos incluso en nuestra alimentación. No puede ser una vida digna si en cualquier momento estamos sujetos a los deseos de un empresariado que no respeta nuestros derechos laborales y sindicales y al cual no le supone ningún coste el despedirnos, al interés de una banca que se aprovecha de las necesidades básicas del pueblo para hacer negocio, y a los de un Estado que busca mantener los privilegios de unos pocos a costa de los demás. Ante esta realidad, sólo nos queda organizarnos y plantar cara a este Estado y a este sistema capitalista, más preocupado de hacer más rico a los ricos que de potenciar la justicia social, con el justo reparto de la riqueza. Ante esto, decimos:

No a la precariedad laboral y al desempleo

No a las 65 horas No al alza de la carestía de la vida
No a la privatización de los servicios públicos
No al endeudamiento de por vida para conseguir una vivienda
Sí al pleno empleo y al salario social
Sí a trabajar menos para trabajar todo@s
Sí a la contención de la especulación
Sí al mantenimiento y mejora de los servicios públicos
Sí a la vivienda

CNT-AIT, Canarias