miércoles, 2 de abril de 2014

Por la boca no muere el pez: Entrevista a militantes del SOV de Madrid



Es un sindicato, pero no es como los demás. Es más que un sindicato, es un anarcosindicato, pues no ha hecho dejación de las ideas anarquistas, estas le inspiran porque aún quiere transformar la realidad que le rodea, y ve en el comunismo libertario la finalidad a la que aspira. Un sindicato que apoya la creación de redes autogestionarias, igualitarias y transformadoras. Un sindicato, en fin, como muchos otros que hay en la CNT, y que miran hacia el mismo horizonte. Hoy nos hemos acercado a varios militantes de este sindicato, que aunque no hablan en representación de nadie, sino de ellos mismos, creemos que reflejan, en términos generales, el sentir de su sindicato, como de aquellos militantes y sindicatos que consideran que los principios tácticas y finalidades, que siempre animaron a la Confederación, no son un mero escaparate o un reclamo publicitario.


- Aunque no venís en representación del SOV si nos podéis explicar brevemente y de manera general en que situación se encuentra en estos momentos el sindicato.

- Podemos decir que hay mucha afiliación nueva que además asume responsabilidades. El momento actual del sindicato está en hacer que esa afiliación se quede, que tenga información suficiente y conocimiento de la organización para que pueda asumir responsabilidades. Hay diversas secciones sindicales tanto de ramo como de empresa. Destacable la sección de informática, preparándose ya para formar sindicato. Tendrá en torno a unos 60 afiliados y está trabajando muy bien en su sector; creando secciones de empresa, asambleas regulares, difusión y edición propia de propaganda. Otras secciones como sanidad, medio ambiente, limpieza, funcionan de forma continuada, lo que da perspectivas de crecimiento

El sindicato tiene una gran actividad en muchos aspectos, como cultura, propaganda, comunicación, solidaridad a nivel confederal, consumo y autogestión, etc. En cuanto a la acción sindical, depende mucho de los conflictos que se tengan abiertos con las empresas, unas veces nos vemos desbordados y otras la cosa es más tranquila, aunque de una manera u otra siempre hay movimiento. Tenemos asambleas semanales, el comité del sindicato se reúne también semanalmente. La verdad es que se saca mucho trabajo adelante.

Después del mazazo que resultó para nosotros el último congreso, en el que no vimos respaldadas las tesis o las teorías que pensábamos que deberían ser coherentes con la trayectoria de la organización, el sindicato se ha recogido un poco en si mismo, se nota que hay menor participación en la vida orgánica de la confederación. Esto no ha frenado nada las actividades propias del sindicato; creación de secciones sindicales, formación de los compañeros/as, y además aplicando el criterio, que ya teníamos previo al congreso, de que el anarcosindicalismo no se puede limitar a gestionar la relación laboral. Para nosotros la CNT, la herramienta CNT, no es una finalidad en si misma sino un medio para conseguir el comunismo libertario, y es ente sentido que miramos a la CNT como algo más que una mera receptora del hecho laboral, por eso estamos apostando y profundizando en temas de consumo, autogestión o colectividades de producción y consumo, con una huerta, con varios años de funcionamiento, o un grupo de consumo con unos 50 miembros y una quincena de proveedores autogestionarios.

Muchos compañeros están participando en redes de autogestión motivados sobre todo por una visión anarquista de esas redes. En cierta manera, estamos colaborando a crear redes que verdaderamente sean igualitarias, que realmente sean trasformadoras y que no se queden solamente en una situación de auto-empleo. Un grupo de 30 personas llevan la huerta del SOV que ha cambiado de ubicación, asumiendo además un nuevo proyecto. Había un centro de recuperación de la Comunidad de Madrid, un centro al aire libre para drogodependientes al que le quitaron las subvenciones, decidieron quedarse ocupando y se ha decidido apoyarlos. Se apoya además al grupo de inmigración de Lavapiés que esta aprendiendo también como auto-organizarse.

- ¿Cual es el nivel de implicación de los afiliados?

- La relación afiliados-militantes es alta, mucha gente de la que se acerca se involucra en el trabajo del día a día. Nuestra mayor preocupación ahora mismo es como conseguir esa integración de la gente nueva y que ésta se forme. Ahí es donde creemos que esta la clave para el crecimiento de los sindicatos de CNT. Por una parte la actividad sindical y social, por otra la integración y formación de la gente nueva. El reto es lograr que todo el que llegue tenga algo que hacer y además sea lo que le apetezca o ilusione.

Una cosa muy importante es que OOVV no es un sindicato homogéneo, aunque haya sindicatos que piensen que OOVV tiene una línea marcada. En las asambleas se defienden, libremente, todo tipo de posturas.

- ¿Cuantas secciones sindicales tiene ahora mismo el SOV, aproximadamente y en qué sectores?

- Que funcionen hay unas 10 secciones, prácticamente en todos los sectores. Hostelería, telemarketing e informática, sector público, limpieza y sanidad son las secciones más activas.

Nosotros procuramos que las secciones se creen únicamente cuando hay una cierta garantía de que se va a desarrollar un trabajo y cuando además se tiene una confianza en los compañeros de la sección Que hayan trabajado un poquito previamente la acción sindical, que conozcan los acuerdos de la organización, su funcionamiento, etc. Esto es nuestra forma de ver el trabajo sindical en las empresas, no hacer una sección sindical con una única reivindicación laboral y con un simple objetivo laboral sino que realmente es implantar allí una sección de la CNT, que realmente funcione y que realmente este llevando la CNT a la empresa, que no se dedique exclusivamente a la cuestión laboral.

- Hemos visto como en otros sindicatos las secciones sindicales están funcionando prácticamente al margen del sindicato, entonces, ¿queríamos saber qué vinculo y qué relación mantienen aquí las secciones con el sindicato, y cómo desde el sindicato mantenéis ese vinculo, y cómo lleváis el trabajo desde la asamblea?

- Vemos este problema y la primera medida que ponemos para que esto no ocurra es la forma de crear las secciones, intentamos que sean compañeros que tengan un compromiso con el sindicato, tampoco que sean militantes reconocidos de años y años, pero si que tengan una cierta implicación en el tiempo que lleven afiliados, aparte una de las funciones de la secretaría de acción sindical es la de contactar y mantener relación continua con las secciones sindicales. Siempre hemos tenido muy claro, que una sección sindical que esté separada del sindicato tiende por naturaleza a un cierto corporativismo. Y nosotros siempre hemos trabajado en contra de ese corporativismo, en ese sentido siempre hemos tenido muy claro que es el sindicato el elemento organizativo y la sección sindical una de sus voces.

- Aunque en el último congreso se incide en que el sindicato es el núcleo fundamental de la organización, se constata una tendencia cada vez más acentuada de la absoluta autonomía de las secciones con respecto al sindicato. Apenas hay contacto entre el sindicato y la sección. Y por otro lado no se hace nada para corregirlo, e incluso muchas veces se prima esta fractura. ¿Cómo el SOV pone de manifiesto este hecho ante la organización para modificar esta situación o al menos para que se plantee?

- Bueno, es complicada la respuesta. Es obvio que desde el último congreso se evidenció que hay dos vías o dos maneras de ver el sindicato. La línea, podríamos llamar oficial (por llamarla de alguna manera), tira por el lado sindical dejando de lado la parte anarquista, y lo de las secciones sindicales es un resultado natural, si tu dejas de lado la ideología anarquista pues te queda el sindicalismo puro y duro que ya se ha visto como lleva a convertir al sindicato en un asesor laboral. La experiencia nos ha mostrado, de una manera evidente, que las secciones que limitan su actividad a un conflicto de empresa acaban desapareciendo, podemos hablar de secciones como las de Mercadona, que mientras dura el conflicto se forma una sección sindical y en cuanto se termina desaparece, por esto nuestra visión no es crear secciones sindicales si no fortalecer al sindicato. Las secciones sindicales que salgan por un problema puntual laboral y se quedan en eso no van a ir a ninguna parte. Lo que si tiene futuro son los compañeros que comprenden la necesidad de organizarse más allá de su empresa y su sector. No creemos que tener una relación muy numerosa de secciones vacías de militantes pero con cotizaciones bancarias sea beneficioso para lo que la organización tiene que aportar al movimiento obrero o al problema de clase. Que precisamente es descorporatizar, desverticalizar, desenmascarar a lo que se denomina alternativo y no es nada mas que renovador. Acabar con toda la demagogia que hay en torno a la representatividad y hacer realmente organizaciones sólidas no vamos a conseguirlo desde secciones que no estén implicadas en el concepto de anarcosindicalismo.

- A raíz de las dos líneas a las que habéis hecho referencia dentro de la organización desde el congreso, ¿como veis el funcionamiento de la Federación Local (FL) de Madrid, cual es la situación en la que se encuentra?

- La FL de Madrid está en la misma situación que la CNT, en la que una parte cree que lo más importante son nuestros principios, tácticas y finalidades, es decir el contenido de nuestras ideas, y la otra parte tira más hacia ese sindicalismo ya comentado que sacrificando el contenido de la ideología prefiere crecer a cualquier costa. Entonces, esa situación, en la FL de Madrid también se da, solo que ha diferencia es que Madrid es mayoritaria la opción que defiende un punto de vista anarcosindicalista, de contenidos, no de imagen. Eso genera muchas situaciones insoportables dentro de la FL, y convivimos a duras penas con ellas. Pero nosotros hemos entendido hace mucho, y más desde este congreso, que esto es una carrera de fondo y que solamente nuestra militancia del día a día y nuestra formación de militantes y la formación en unas ideas anarquistas en las que creemos, son las que pueden hacer cambiar esta situación y que la CNT vuelva al cauce originario; buscar la revolución social.

- Desde fuera de Madrid se puede observar que existe un conflicto, por ejemplo, el 1º de Mayo del año pasado la CNT realizó dos manifestaciones separadas con dos recorridos diferentes. Esa división se percibe, desde fuera, como innegable, por eso queríamos profundizar en ese sentido. ¿Cómo se está viendo esa división en la ciudad y en el resto de la organización?

- Dentro de la organización percibimos que hay una cierta criminalización hacia nuestro sindicato, en ese sentido sí se ha generado una “opinión pública” de que en Madrid el sector anarcosindicalista no acepta los acuerdos, de que si se hace boicot a manifestaciones, etc. Esta cuestión hay que desmentirla rotundamente. En Madrid los compañeros nos consideramos con capacidad de tener una expresión propia. Esa expresión propia es la que motiva que la gente de la FL de Madrid, cuando llega una huelga general o cuando hay una movilización, tenga capacidad y pueda convocar por si misma los actos, hay otros compañeros que no aceptan este acuerdo y se adscriben a otros acuerdos de otros ámbitos nacionales. Nosotros no estamos en contra de que en una localidad se pueda llegar a una acuerdo de asistir a una movilización conjunta puntualmente, lo que ocurre es que en Madrid sí nos vemos con capacidad de movilización como para denunciar estas plataformas que se crean. Que son un poco de imagen y que juegan a ese marketing político de ver cuanta gente hemos movido en lugar de formar organización. Las pruebas evidentes de que esta línea no está funcionado para la organización, es que todas estas movilizaciones, todo estos grandes titulares que se forman con técnicas periodísticas, no generan afiliación y no generan militancia. Acaban siendo flor de un día.

- Desde el congreso de Córdoba, continuando con la cuestión de la división, es patente esta división dentro de la CNT. División que ha provocado una fuerte apatía en la confederación. Al margen de la alta actividad del SOV, según comentáis, ¿veis vosotros esta apatía?

- Nosotros por supuesto que vemos una apatía en la organización, en muchos sindicatos y muchos compañeros Hay mucha apatía orgánica, la gente de este sindicato que fue al congreso volvió muy desmoralizada y eso hizo que el sindicato, por supuesto, se desmoralizara, pero nuestra situación actual, la del sindicato, es la contraria a la apatía. Nosotros estamos aquí porque hemos decidido prácticamente dedicar nuestra vida a esto, para nosotros estos son nuestros ideales, esta es nuestra vida, y no queremos luchar por otra cosa. El día en el que la CNT sea un lugar en el que no se pueda estar porque las contradicciones que tengamos que asumir sean tan grandes, nos iremos y empezaremos de nuevo un camino como lo hicieron los anarquistas de antaño. Pero hoy por hoy, hemos decidido seguir hacia adelante con el deseo y la ilusión, no os diríamos que con más, de volver hacer relucir las ideas anarquistas dentro de la organización es algo que nos motiva muchísimo. Por eso hemos apostado por crecer, por formar a la gente y llevar nuestras ideas a todas partes, esto es lo que nos sigue dando ánimos.

- Se consagra un congreso para el aumento de la afiliación y para ello se rebaja el anarquismo en la CNT. Y sin embargo ese crecimiento exponencial no se ha producido. Por el contrario, se intuye una tendencia hacia una perdida de afiliación. ¿Que opináis de esto?

- Lo que ocurre es que la estrategia de quienes apoyaron y apoyan la tesis del crecimiento sin más, patentadas en el congreso, pasa por incrementar la imagen hacia afuera, incrementar la visibilidad de la organización, y para ello en necesario acercarse a posturas que son más asumibles para el conjunto de la población. independientemente de la ideología de la organización.

Si bien es cierto que te tienes que dirigir al conjunto de la población, también es cierto que esta es una organización que requiere un tipo de persona que, cuanto menos, se implique en la misma. Estamos en una sociedad que delega en todo. La incorporación de militantes y de afiliación se va a producir por medio de la implicación y la implicación es ideológica. En el tiempo que llevamos en la organización hemos visto pasar a muchos compañeros, y lo que hemos visto es que la gente que se ha hecho militante, o bien se ha afiliado por una cuestión ideológica, o ha ido empapándose de la ideología a lo largo del tiempo, son los compañeros que aportan trabajo al sindicato, los que se acaban quedando. Los afiliados que no se les ha formado, los que vienen a que se les resuelva su problema, que simplemente se les pasa la cotización por banco, y no participan de la vida del sindicato pueden durar X años, pero acaban yéndose. Vemos que la capacidad de tener abierto el sindicato día a día, o que si convocas un piquete haya gente que vaya a ese piquete, se consigue con esta línea de trabajo que es la que incide en la ideología que es la que hace que la militancia se implique.

- ¿Cómo es posible que no haya una gran respuesta de la organización de cara a los resultados del último congreso?. Es verdad que se tarda en hacer militantes. ¿pero es que la CNT no tenia militantes antes? ¿La gente esta dormida? ¿O es la mayoría de la CNT la que quiere seguir por este nuevo camino?

- La CNT ha entrado en una dinámica vertical y centralizadora, no completada todavía, pero estamos en camino. Lo que pasa con las organizaciones verticales es que hay un grupo pequeño que son los poseedores de la verdad. Esto conlleva a que ya no haya debate dentro de la CNT. Si yo, que soy el que manda aquí, me equivoco ya me encargare de que el fracaso sea el fracaso de otro, si el proyecto de la mayoría congresual no funciona es porque la minoría no lo apoya, siempre buscando excusas, siempre buscando chivos expiatorios, pero esta mayoría, ¿es que no es capaz de sacar adelante su propio proyecto?.

- Habéis mencionado que hay una especie de criminalización dentro de la organización hacia algunos sindicatos o hacia algunas actitudes, estigmatizadas por ser expresadas o mostradas. Un ejemplo paradigmático de ésto es una mencionada (en un artículo en esta revista) persecución llevada a cabo contra este sindicato porque algunos militantes, en una manifestación, gritaran: "reformistas fuera de organización". Viendo esta mención queríamos saber ¿cómo lo vivís desde aquí?, ¿es real?, ¿está exagerado?, ¿fue una simple anécdota?. Nos gustaría que nos habléis de ello.

- Si te refieres a los hechos que ocurrieron en la manifestación del 29 de septiembre donde se grito fuera reformistas de la organización, ha sido una de los actos en los cuales se ha jugado a criminalizar, a decir que boicoteamos, en definitiva, lo ya mencionado. A esa manifestación no fue solo el SOV de Madrid, esa manifestación fue un acuerdo de la FL de Madrid y no se gritó solamente eso. “Reformistas fuera de la organización” solo fue un grito al que se le ha marcado en titulares para que todo quede resumido a eso, allí fuimos a decir lo que la CNT dice, y nos hinchamos a gritar contra las subvenciones, contra los comités de empresa, contra los liberados, porque creemos que ese es el planteamiento que tiene la organización y lo que tiene que difundir.

Ahí se ha hablado de boicot cuando no lo ha habido. Boicot es cuando la FL de Madrid convoca un acto como puede ser cualquiera de las manifestaciones con motivo de huelgas y otro sindicato de la propia FL de Madrid convoca un acto a la misma hora y en otro sitio, eso si es un boicot. Bueno, esto fue un hecho concreto, pero la criminalización al SOV de Madrid como a otros sindicatos como puede ser Candas, a Levante, Zamora, Metal Madrid, Granada y muchísimos otros sindicatos, es lo que le ha pasado tanto tiempo a Cádiz, esto viene pasando desde mucho antes del congreso y en el caso del SOV de Madrid quizás se ve agravado por mantener una postura diferente a los acuerdo oficiales de la organización, y al ser ésta la capital del estado, con la significación que ello conlleva, todavía les causa más problemas. También creo que esa criminalización se produce para cegar, tapar el hecho de que nuestro sindicato funciona, y funciona bien, tiene actividad, tiene afiliación, tiene buenos resultados; somos la negación de sus tesis y entonces en lugar de rebatirnos en el ámbito ideológico, lo que hacen es decir tú eres un boicoteador y no haces otra cosa que molestar.



- Hay otra cuestión que ha afectado bastante a vuestro sindicato es lo referente a Marsans, no queremos que nos expliquéis la problemática, sino al trato que sufristeis en relación al ERE en comparación a cómo se ha tratado al Sindicato de Transporte de Madrid y el conflicto de Iberia.

- La verdad es que no hemos sabido explicar la situación, lo que ocurrió en viajes Marsans es muy sencillo, ocurrió que una asamblea de trabajadores rompió la representatividad del comité de empresa imponiendo que la sección sindical de CNT estuviera en la mesa de negociación. Otro tema es lo que ocurre dentro del contexto de quiebra de una empresa. En aquel momento estaba en vigor el 8º congreso, que proponía que en caso de quiebra, autogestión. Esa sería la parte que no han podido cumplir los compañeros de Marsans porque quedaban 2000 trabajadores y una nomina de 3 millones y medio al mes. Eso no hay manera de autogestionarlo,. La empresa estaba absolutamente fundida, tenía 500 millones de deuda. ¿Cómo es posible que en una plantilla de 2000 personas todos tuvieran la conciencia de que la empresa no existía, que no tenía crédito en ninguna parte y que no producía nada?. La única situación que quedaba era cambiar el panorama, pasar de ser trabajadores a ser acreedores, ser acreedores permite poder seguir fiscalizando todo el proceso de liquidación de la empresa. Los trabajadores constituyeron una asociación de 900 miembros que hoy en día esta personada, no solamente en los cuatro concursos de la empresa, esta también personada en la audiencia nacional donde están haciendo el seguimiento de las trampas que pudiese tener la empresa y en definitiva a dado una salida que ha permitido una persecución, al empresario, Díaz Ferrán y un mantenimiento de unión de los trabajadores. Allí no se vendía ningún puesto de trabajo porque allí no quedaba ningún puesto de trabajo, solo hay una denuncia de un trabajador, de los 2000 que éramos, que se opone al ERE por una razón, era el director económico financiero que cobraba 400.000€ euros de salario anual mas incentivos, y que perdía dinero porque el ERE estaba topado en 70.000€ para quitarles indemnización a los ejecutivos y dárselos a las “clases bajas”, ese ha sido el único trabajador disconforme junto a 3 miembros del comité de empresa que, en contra de la ley, nos negamos a que se quedasen a gestionar la confección de liquidaciones, en lugar de los trabajadores que habitualmente se ocupaban de ello 

- No te preguntaba tanto por el desarrollo del conflicto si no las comparaciones, las justificaciones de un lado y no aceptar las explicaciones de otro.

- El tema del ERE de Marsans es probablemente la mayor maniobra política que ha pasado en esta organización en los últimos años, sabían que no había otra solución y sabían el desarrollo del conflicto. El asunto más gordo es que no se puede reconocer que una plantilla de 2000 personas apoyaba a una sección de CNT de un sindicato que no era de su línea y rompía la representatividad de un comité de empresa demostrando que no es necesario estar en los comités de empresa para tener actividad y presencia sindical. Hay que ver que el asunto de Marsans fue justo antes del congreso y estos sindicatos vieron una oportunidad clarísima de sacar una campaña facilísima porque simplemente las siglas ERE iban a volcar a la organización sin profundizar y con esto vieron una oportunidad de desacreditar al SOV de Madrid de cara al décimo congreso y de cara a esa defensa de sus ponencias.

- Como vivís en Madrid esa comparativa con el tema de Iberia. Lo de Marsans lo estáis planteando como una estrategia política y en el caso de Iberia la realidad que vivís es otra. Como os sentís.

- El caso de Iberia no ha ocasionado ningún problema, nosotros señalamos en su momento que se estaba pidiendo una huelga para pedir una baja incentivada, ya que al subscribir la plataforma conjunta, que se formó en Iberia, se incluía la aplicación de un ERE de bajas incentivadas. Nosotros teníamos claro que la situación creada en la CNT por el tema de Marsans se produjo por un hecho político y por conveniencias políticas internas de la propia CNT. En esa línea entendemos que cuando posteriormente se produce una situación similar con el caso del Sindicato de Trasportes, como ese componente político no solamente no esta, si no que no interesa pues se hace justo todo lo contrario que es taparlo, o apoyarlo desde el Gabinete Técnico. En este caso es un expediente de crisis no un cierre de empresa, eran acuerdos para mejorar la cuenta de resultados de una empresa y que por lo cual había que oponerse, ese seria el caso de Iberia. Iberia no va a desaparecer, va a dar beneficios. Iberia llega a un acuerdo con sus trabajadores para dar una baja incentivada, para quedarse con el puesto de trabajo amortizado y aquí paz y después gloria.

- Ya que habéis mencionado el Gabinete Técnico Confederal ¿Qué opináis de su creación y que consecuencias pensáis tendrá en la Confederación?

- La creación del gabinete técnico confederal es una muestra más de las tendencias centralizadoras y tecnocráticas que están actuando en la CNT. No creemos que sea positiva ni esa centralización ni la preponderancia a las cuestiones técnicas que la existencia de un organismo así inevitablemente conlleva. En nuestra opinión su creación contradice el principio básico de autogestión y acción directa. Por un lado porque los sindicatos y secciones no gestionan sus conflictos, sino que delegan en él gabinete, por otro porque la organización al dedicar la mayor parte de sus recursos a un gabinete básicamente legal y reducir el fondo pro-presos en previsión de la represión, está primando en la práctica la vía judicial sobre la acción directa que es de la que se derivan las sanciones represivas. Por otro lado la fórmula que se ha buscado para su creación hace que no haya un necesario control del gabinete por la organización, como si ocurre con los cargos de gestión, quedando exento hasta de la rotatividad de los cargos.

No queremos decir con esto que la militancia de la CNT deba ignorar las cuestiones legales o jurídicas que inciden en un conflicto. Deben ser contempladas al igual que el ánimo de la plantilla, la capacidad de movilización, otros intereses del empresario, etc. Es como en el caso de la formación; nuestro criterio es que es necesaria pero por supuesto no se puede limitar a reciclar modelos de cursos técnicos de empresa o universidad. Preferimos una formación basada en el intercambio de experiencias, la incentivación de los conocimientos históricos, el fomento del esfuerzo en la formación personal de cada uno..., es decir, algo mas que el concepto“formador de formadores”, que tan solo centraliza y unifica interpretaciones subjetivas, eliminando la capacidad creativa de cada sindicato o regional.

Por último, ¿Cómo veis el futuro de la organización?

- Bueno pues el mayor problema que tiene la CNT para su crecimiento y proyección pensamos que es su propia situación interna de confrontación. Al hilo de la calle se puede afirmar que cada vez son más los colectivos y personas que toman iniciativas sobre sus propios problemas más allá de las organizaciones parlamentarias clásicas, políticas o sindicales. Y aunque al ciclo de la derecha liberal, le siga el ciclo de los liberales de izquierda, todo parece indicar que asamblea, acción directa, rechazo de los profesionales políticos o sindicales son ideas que van calando y teniendo resultados prácticos. Si la CNT consigue detener en su seno las posiciones excluyentes, expulsiones1 y enfrentamientos y difunde muy claramente sus acuerdos, podrá presentarse con fuerza como la opción que históricamente fue: la organización de los de abajo para establecer la igualdad y la libertad en la sociedad. Todos debemos hacer un esfuerzo en ese sentido. No hay otra.


Extraído de la revista de pensamiento y crítica anarquista "Adarga", nº 2.