La policía y el estado como instrumentos de la lucha de clases y la opresión
No hay que buscar muy lejos para encontrar ejemplos de cómo se usan la policía y el aparato del estado en momentos de resistencia a la explotación y la opresión. Por todo el mundo vemos como, una y otra vez, las protestas obreras son aplacadas por la policía, como los movimientos de les oprimides son suprimidos por la fuerza. El papel del estado en el mantenimiento del poder de las élites está claro desde hace mucho tiempo.
A lo largo de los últimos años, muchas veces hemos tenido que enfrentarnos a la represión real por parte del estado, a menudo exagerado en sus reacciones. El estado ha intentado convertir a les compañeres en terroristas, por ejemplo en el caso de les compañeres de ASI hace unos cuantos años, o en el ridículo caso de la detención de un compañero de la CNT-AIT a principios de 2016 por participar en un espectáculo políticamente satírico de marionetas. En Polonia, la Oficina de Correos dirigida por el estado también intentó, sin éxito, acusar a un compañero de la ZSP de “hacer un llamamiento a una revolución sangrienta”, lo que también podría haber terminado con imputaciones graves.
La policía y el estado continúan reprimiendo y nosotres continuamos reaccionando. Compañeres de todo el mundo se enfrentan al acoso y a la violencia que nosotres condenamos sin tener en cuenta su nivel de severidad. En España, los movimientos sociales libertarios están siendo atacados y, en Rusia, la misma libertad para protestar se ve gravemente restringida por el estado. En Serbia, ASI ha estado llevando a cabo acciones directas recientemente para organizarse con les inquilines para evitar desahucios y la policía ha estado monitorizando a les activistas y presentando cargos contra elles. En Australia, la policía ha estado llevando a cabo acciones brutales contra les refugiades en la isla de Manus. Durante una reciente manifestación en Melbourne en apoyo de les refugiades, cuando atacaron los matones de derechas, en vez de reaccionar, la policía apaleó a nuestro compañero de la ASF. Cuando las sangrientas imágenes sacudieron al mundo, en algunos medios la policía hizo como que habían pacificado a un atacante de derechas, cuando de hecho se mantuvieron de brazos cruzados en relación a los ataques contra la manifestación pacífica.
El estado también sigue posibilitando la represión de les trabajadors que inician acciones contra los empresarios. Tal es la situación de un trabajador de ZSP que reclamó a su empleador, una importante cadena de supermercados, por varias formas de abuso. El supermercado presentó una denuncia penal ficticia contra el compañero e intentó iniciar otras contra varies trabajadors y un par de otres miembres de ZSP.
Allí donde todo esto no les funciona, usan constantemente a la policía como instrumento de acoso.
La Asociación Internacional de los Trabajadores, que fue creada para luchar tanto contra el capitalismo como contra el estado, condena todas estas instancias de represión, así como la tendencia general a reprimir la resistencia. Hacemos un llamamiento a todes les compañeres del mundo para que reaccionen en todo momento y en todo lugar en que la policía o el estado hayan cometido una agresión y para que se mantengan vigilantes. ¡Si tocan a un@, nos tocan a tod@s!
Secretariado de la Asociación Internacional de l@s Trabajador@s (AIT)
2 de diciembre de 2017
2 de diciembre de 2017