Jueves 1 a las 12h. Embajada serbia. C/Velazquez, 162 (Metros: R. Argentina, Cruz del Rayo y Av América).
Sabado 3 a las 12h. Sol. El 3 de septiembre cinco militantes de la Confederación de Sindicatos Iniciativa Anarcosindicalista ASI-AIT fueron detenidos bajo la acusación de Terrorismo Internacional. El 4 de septiembre el Tribunal Local de Belgrado decidía que los miembros de la ASI serían retenidos durante 30 días. Su delito, el mismo que el de otros muchos anarcosindicalistas y anarquistas que ansían instaurar una sociedad de libertad y justicia social. Su delito, organizarse para mejorar las condiciones de vida de los trabajadores serbios. Su delito es, al fin y al cabo, querer sacudirse de encima todos los parásitos que viven de la sangre del pueblo laborioso. Pues bien, no esperamos clemencia. No esperamos justicia ni piedad. No la esperamos del estado serbio ni de ningún otro, pues son los gobiernos, los jueces, los capitalistas, los policías y carceleros los que nos mantienen atados al yugo del capital. Y ¡ay del que se quiera soltar!. Detenciones, aislamientos, torturas, cárceles… Por ésto mismo, porque sabemos que pertenecemos a una clase, porque sabemos que somos más y porque sólo en nosotros confiamos para conquistar el futuro, es la hora de luchar. Es hora de luchar y de dar ayuda a los que caigan sin quitar nunca la vista del horizonte que perseguimos Mostremos nuestra solidaridad con los compañeros serbios, denunciemos la injusticia y la represión y, a la vez, organicémonos como clase al margen de intereses espurios de partidos, liberados y sindicaleros. Por ello hoy como siempre:
Sabado 3 a las 12h. Sol. El 3 de septiembre cinco militantes de la Confederación de Sindicatos Iniciativa Anarcosindicalista ASI-AIT fueron detenidos bajo la acusación de Terrorismo Internacional. El 4 de septiembre el Tribunal Local de Belgrado decidía que los miembros de la ASI serían retenidos durante 30 días. Su delito, el mismo que el de otros muchos anarcosindicalistas y anarquistas que ansían instaurar una sociedad de libertad y justicia social. Su delito, organizarse para mejorar las condiciones de vida de los trabajadores serbios. Su delito es, al fin y al cabo, querer sacudirse de encima todos los parásitos que viven de la sangre del pueblo laborioso. Pues bien, no esperamos clemencia. No esperamos justicia ni piedad. No la esperamos del estado serbio ni de ningún otro, pues son los gobiernos, los jueces, los capitalistas, los policías y carceleros los que nos mantienen atados al yugo del capital. Y ¡ay del que se quiera soltar!. Detenciones, aislamientos, torturas, cárceles… Por ésto mismo, porque sabemos que pertenecemos a una clase, porque sabemos que somos más y porque sólo en nosotros confiamos para conquistar el futuro, es la hora de luchar. Es hora de luchar y de dar ayuda a los que caigan sin quitar nunca la vista del horizonte que perseguimos Mostremos nuestra solidaridad con los compañeros serbios, denunciemos la injusticia y la represión y, a la vez, organicémonos como clase al margen de intereses espurios de partidos, liberados y sindicaleros. Por ello hoy como siempre:
¡FORTALECE LA REVOLUCIÓN LUCHANDO JUNTO CON LA ASOCIACIÓN INTERNACIONAL DE LOS TRABAJADORES!