Las trabajadoras y trabajadores del sector de la informática afiliados al Sindicato de Oficios Varios de la Federación Local de la CNT de Madrid hemos decidido organizarnos para dar una respuesta a los constantes abusos que sufrimos por parte de la clase empresarial.
Nuestra sección la forman trabajadoras y trabajadores que -independientemente de su profesión- desarrollan su actividad principal y diaria en una empresa del ramo de las telecomunicaciones y los servicios informáticos. Alentamos a todas las trabajadoras y a todos los trabajadores de este ámbito a que se unan a nosotras para lograr nuestro último fin, la Anarquía.
Tenemos unas reivindicaciones mínimas.
Subidas de salario lineales e inmediatas.
Disminución de las jornadas de trabajo y aumento del tiempo de ocio y vacaciones.
Erradicación de los nuevos sistemas de trabajo que implican desafección del puesto, polivalencia y movilidad funcional y geográfica.
Adelantamiento de la edad de jubilación.
El control por parte del sindicato de la producción y la contratación.
Queremos la transformación radical de la sociedad, la supresión del trabajo asalariado, la revolución social. Nuestra finalidad es el Comunismo Libertario, un sistema socio-económico que haga de la libertad y de la igualdad sus valores fundamentales. Y pensamos que para conseguir nuestros fines debemos utilizar unos medios coherentes con ellos. No todo vale. El fin nunca justifica los medios. Si queremos una sociedad libre, igualitaria y fraternal, nuestra organización y nuestra acción debe ser libre, igualitaria y fraternal.
Tenemos tres principios que son irrenunciables: la Autogestión, el Federalismo y la Solidaridad y Apoyo Mutuo.
En consecuencia con estos tres principios, nos organizamos usando la democracia directa, sin dirigentes. En nuestras asambleas existe plena libertad e igualdad en el intercambio de ideas.
Nuestra táctica para solucionar los conflictos es la Acción Directa, esto es sin intermediarios. Por el principio de Solidaridad y apoyo mutuo, el conflicto es sacado del ámbito de la empresa y se convierte en un problema local, regional, nacional o incluso, internacional, de esta forma, mucha más gente interviene en la solución del conflicto y la victoria, es más sencilla.
No tenemos miedo a nada. Vamos a cambiar el mundo.
Paz a los hombres y guerra a las instituciones.