“Téngase en cuenta que los que viven a la sombra del privilegio, los que se hallan en perpetuo déficit con la razón, con la justicia y con la propia conciencia; los que invocan los derechos adquiridos y no pueden determinar su voluntad a renunciar los privilegios que disfrutan, son por esencia estacionarios, y no hallarán jamás el momento oportuno para decidirse…”.
Anselmo Lorenzo