Varios estudios muestran que el riesgo de incendios en los bosques boreales del Norte ha aumentado durante los últimos años a consecuencia del cambio climático. Nos muestra que los bosques templados están comenzando a perder su capacidad de absorber dióxido de carbono.
Los científicos temen que muy pronto puede llegar un punto en el que la cantidad de CO2 emitido por los bosques del norte como resultado de los incendios y la perdida de humedad del suelo superará la cantidad que es absorbida durante el crecimiento anual de los árboles. Dicha expectativa hará aun más difícil que se pueda controlar el calentamiento global ya que los bosques del norte son vistos como un elemento clave en las ecuaciones para mitigar los efectos de la contribución humana de CO2.
Dos estudios que se han publicado hoy muestran que el aumento en incendios forestales en los bosques boreales- los segundos más grandes después de las selvas tropicales- han debilitado uno de los mayores sumideros terrestres de CO2.
Uno de los estudios muestra que en uso pocos años, los incendios forestales en los EEUU producirán mas CO2 emitido a la atmósfera durante dos meses que la cantidad anual emitida por los vehículos mas la producción de energía de un estado medio de los EEUU.
Un segundo estudio muestra que en un periodo de 60 años en una área de 1 millón de kilómetros cuadrados de Canadá ha aumentado significantemente, en gran medida debido a unas condiciones climatológicas más secas producidas por el calentamiento global y el cambio climático. El profesor de Ecología Forestal de la Universidad de Wisconsin-Madison,Tom Gower, dice que su estudio demuestra que los fuegos han tenido un impacto en las emisiones de los bosques boreales durante el periodo de 60 años que otros factores como la lluvia; aun así el clima es fundamental en el problema.
La intensidad y frecuencia de los incendios están influenciados por el cambio climático ya que las olas de calor y un subsuelo más seco provoca los incendios. “El cambio climático es lo que esta alterando los cambios en los incendios. Son dos sistemas inseparables” dijo el Profesor Gower.“Todo lo que se requiere es un año con poca nieve y un verano seco. Con unos cuantos relámpagos, es como una caja de cerillas.
Históricamente los bosques boreales han sido un importante sumidero de carbono, absorbiendo mas carbono del que emitían. Sin embargo, el último estudio, publicado en Nature, sugiere que el sumidero ha ido decreciendo en las últimas décadas, y que puede estar convirtiéndose en una gran fuente emisora de carbono, dijo el Profesor Gower.
“Basado en nuestro conocimiento actual, el fuego ha sido un conductor mas importante en el balance de carbono que el clima en los últimos 50 años. Pero si la concentración de carbono se duplica en los próximos 50 años y la temperatura aumenta entre 4 y 8º C, todas las apuestas pueden cancelarse.
El segundo estudio publicado en Carbon Balance and Management, muestra que las emisiones de dióxido de carbono de algunos incendios forestales han excedido las emisiones de vehículos y energía en los estados individualmente de los EEUU.
Christinee Wiedinmyer del US Nacional Centre for Atmospheric Research en Boulder, Colorado, utilizaron datos de los satélites para estimarla emisión de CO2 basada en la cantidad de cubierta forestal en áreas determinadas.
En algunos años, la cantidad de CO2 emitida por los incendios forestales ha sido equivalente al 5% del total de las emisiones humanas globalmente. Pero en otros años, los incendios más intensos y extensos tuvieron como resultado un aumento enorme en la cantidad de emisiones.
Existe un potencial significante para una emisión neta adicional de carbono de los bosques de EEUU debido a un cambio en la dinámica de los fuegos en las próximas décadas” ha dicho el Dr. Wiedinmyer.