sábado, 4 de agosto de 2007

Matanza de tigres y leones en una finca de Badajoz


Guardaban a los animales protegidos para "en espera de ser puestos en libertad para , inmediatamente, abatirlos", han explicado , al ser apresados el sábado a siete personas por organizar o participar en las actividades de una finca próxima a la localidad de Monterrubio de la Serena (Badajoz) en la que se cazaban ejemplares de especies salvajes o protegidas.
Las detenciones se produjeron en la finca Lunares, de la Sierra del Oro, durante una operación del SEPRONA que se desarrolla desde hace meses, y que permanece abierta. Los agentes investigaban la finca desde el pasado verano. Ya habían descubierto que, a finales de noviembre, en dicha finca había sido abatido un cachorro de tigre.

También sabían que a primeros de este mes estaba prevista otra cacería, y esperaron al sábado. Ese día, cuando escucharon los primeros disparos, entraron en el recinto y encontraron un tigre ya muerto, así como un león y un tigre, encerrados en sendas jaulas y hacia el que, supuestamente, los detenidos se dirigían "para hacer la suelta y abatirlo también", ha explicado la Delegación del Gobierno.

Se anunciaba en Internet
La empresa se anunciaba en Internet,
a través de una página web en la que indicaba que en sus terrenos se podía practicar caza de Muflón, Gamo, Ciervo, Jabalí, Arrui y Lobo, aunque no anunciaba la posibilidad de abatir tigres o leones.
El tigre fue matado con una carabina del calibre 22, un arma ilegal para la práctica de la caza. Tanto el tigre como el león hallados vivos -que fueron adquiridos legalmente, aunque se desconoce su procedencia- han sido enviados a un zoo de Málaga.
Se trataría, agregaron, de "cacerías ilegales" que se habrían celebrado en la zona.
Los cazadores furtivos llegaban a pagar 24.000 euros por cazar un lobo
Según se publicaba,
al menos siete personas fueron detenidas el pasado sábado, día 3, supuestamente implicadas en las actividades de este safari, en que se habrían abatido leones, tigres, linces y lobos.
Los detenidos son el gestor del safari, M.D.M., de 41 años, los guardas de la finca, J.P.B.N., de 25, y M.B.MB, de 22, además de un menor de edad. Todos ellos eran naturales de Monterrubio de la Serena.

Tres cazadores madrileños
También fueron detenidos tres cazadores que, supuestamente, participaron en el safari: se trata de D.J.O., un hombre de 55 años y vecino de Madrid; B.T.S., una madrileña de 52, y J.F.M., un hombre de Fuenlabrada (Madrid), de 33 años de edad.
Según la información publicada , los responsables de la finca facilitaban a cazadores el poder abatir a estos animales a cambio de determinadas cantidades de dinero, unos 24.000 euros, por ejemplo, en el caso de un lobo.


Como veis compañero/as después se las dan de protectores del equilibrio natural con sus practicas de cinegética.... No solo hay taurinos asesinos, sino cazadores asesinos y cobardes, que aplacan sus ansias de matar con animales indefensos y recién puestos en libertad. Dan asco !!!