Este país ha conocido estos últimos años una situación de crecimiento económico que ha hecho olvidar a muchos la inseguridad de la condición obrera y la violencia del capitalismo. El crecimiento se ha apoyado en la precariedad laboral, el consumismo y el endeudamiento. Ha favorecido a la patronal, bancos y políticos que, por procedimientos 'legales' o por la corrupción, se han beneficiado de este fenómeno de manera brutal.
Por otra parte, el consumismo y la precariedad laboral han favorecido el individualismo, el miedo a perder lo poco que se tiene. Los que tienen un puesto fijo muchas veces se han desinteresado de la situación de los trabajadores eventuales, olvidando que la solidaridad entre todos: fijos y eventuales, mujeres y hombres, inmigrantes y nativos es el único camino para mejorar las condiciones de vida y lograr la libertad y el cambio social.
En España, el 'dinero fácil' masivamente prestado por los bancos ha producido una burbuja inmobiliaria. La subida de los precios ha expulsado gran parte de la población, en su mayoría jóvenes, del acceso a una vivienda digna. ¡Y ahora viene la crisis! El paro aumenta, sobre todo entre los trabajadores de la construcción y sectores relacionados (ladrillo, cerámica, muebles, agencias inmobiliarias...). Los verdaderos beneficiarios de este tinglado se han largado, construyendo ahora inmuebles en Marruecos o en Polonia y quedando aquí hogares con hipotecas descomunales cuyas cuotas no paran de subir con el 'Euribor' y promociones sin vender. A este panorama hay que añadir una subida de los precios al consumo, sobre todo de los productos más básicos y de primera necesidad: leche, alimentos frescos, pan, etc.
Durante la última campaña electoral, el gobierno ha ocultado deliberadamente la gravedad y la profundidad de los desequilibrios económicos, anunciando cifras de crecimiento que ahora ha corregido de manera drástica a la baja. Esto nos demuestra como el Estado utiliza el arma de la desinformación y de la mentira, esté el PP o el PSOE en el poder.
Los sindicatos 'mayoritarios' cómplices del Estado y de la patronal han firmado reformas laborales y convenios colectivos vergonzosos que solo abaratan los despidos.
Los trabajadores no debemos caer en la trampa que hoy en día nos tienden la patronal, los bancos y los políticos de acusar de la crisis a los sectores más frágiles de nuestra clase. Ahora se oyen voces que acusan a las familias obreras de haberse endeudado excesivamente, ocultando de forma deliberada la responsabilidad de los bancos en la burbuja inmobiliaria y de la crisis financiera, olvidando los monstruosos beneficios de los especuladores (promotoras, constructoras...) que ahora piden ayudas del Estado...
También acusan a los trabajadores y trabajadoras inmigrantes de ser responsables de las dificultades, del aumento del paro. Mientras que hace algunos meses se les reconocía la virtud de contribuir al crecimiento de la economía española y de compensar la baja natalidad y el envejecimiento de la población.
La CNT plantea la imperiosa necesidad de resistir a la ofensiva generalizada del Estado y de la patronal que quieren hacernos pagar a los trabajadores el precio de sus excesos y de su depredación.
- Por el apoyo mutuo entre los oprimidos.
- Por el rechazo de los profesionales del sindicalismo y la política y sus elecciones. Por la abstención activa.
- Que todos los trabajadores y trabajadoras reunidos en asamblea general o en sección sindical sean los únicos en tomar decisiones y no la estructura de elecciones sindicales-comités de empresa que lo único que hacen es favorecer a la patronal y quitarle la voz y la rabia a las trabajadoras. Hagamos de la acción directa la mejor forma para los trabajadores de defender sus intereses.
AHORA MÁS QUE NUNCA SOLIDARIDAD OBRERA Y ANARCOSINDICALISMO
La CNT invita a los trabajadores, trabajadoras y al pueblo de Granada a la Concentración a las 12:00 en la PLAZA DE LAS PASIEGAS De donde saldremos en manifestación hacia la PLAZA DE LA LIBERTAD donde tendrá lugar un mitin y varias actuaciones fraternales.
CNT-AIT Granada