domingo, 3 de enero de 2010


Autor: Cartelistas, CNT-AIT.
Editor: Sindicato Unico Regional de Peritos y Técnicos Industriales, Valencia.
Comisión Organizadora Hospitales de sangre y Guarderías de Niños.
Año: 1936-1939.

Con la "estabilización de la política de Guerra", la CNT ve reflejados en sus iconográficos los acontecimientos políticos en que se ve envuelta. De los carteles desaparecen las milicianas, aparecen los carteles de unidad CNT-UGT, se llama al trabajo voluntario para el frente, se define la problemática agrícola dirigiéndose al campesinado en un lenguaje más tradicional: los colores fuertes de los primeros días marcan ahora un aspecto más idílico del trabajo-esfuerzo.

La Confederación Nacional del Trabajo, no deja por ello de enviar sus propios mensajes, recuerda a todos que enemigos son todos aquellos que frenan la experiencia libertaria: " Campesino, rota las cadenas, no consientas que te opriman los tiranos".
Pese a tener adscrito el movimiento libertario la única organización de carácter feminista de la época, Mujeres Libres, la expresión de los carteles libertarios suelen responder a una imagen de exaltación de la mitología viril y musculosa, el hombre, el fusil, el pecho descubierto...
La mujer miliciana de primera hora desaparece y la imagen femenina es representada en sus aspectos de madre, productora, enfermera, será mujer en la retaguardia.

El lenguaje empleado será metafórico, directo y pasional, utilizando el Bien y el Mal como base referencial de lo antifascista y fascista. La Salud y la Juventud para llamar a los más jóvenes al camino de la revolución y el cambio social. El niño servirá de marco referencial para hablar de la escuela, de la manipulación ideológica, del bien futuro por el que hay que construir luchando y conseguir el triunfo de la revolución.
Las imágenes del campesino encorvado bajo el esfuerzo cotidiano, será contrastada siempre con el campesino levantando la vista hacia arriba, cambiando los antiguos sistemas de trabajo por la idea nueva del cambio que introduciría la mecanización liberadora de la servidumbre a la que está sometido.
En la industria de guerra se exaltará el cambio social: no sóle se persigue el objetivo del triunfo bélico, se espera transformar la sociedad. El cartelismo del movimiento libertario transmitirá en su conjunto un mensaje de expresión libre y sin trabas de las fuerzas vitales individuales y sociales.