sábado, 17 de abril de 2021

Homenaje a Pastora y a Xosé Tarrío el 25 de abril




El próximo 25 de abril hace ya 2 años que Pastora murió y en su recuerdo se va poner una placa en donde vivía y rendir homenaje en la playa Rías, donde fueron esparcidas sus cenizas y las de su hijo Xosé Tarrío. Luchadora incansable contra las cárceles, madre coraje, mujer solidaria de gran carácter y gran corazón, la muerte de Pastora dejó un vacío enorme en la lucha anticarcelaria y en el movimiento anarquista.

Su hijo Xosé Tarrío (apodado como Che), natural del barrio Coruñés de Katanga, nos acercó la dura realidad del régimen FIES (Ficheros de Internos de Especial Seguimiento) a través de su libro ‘Huye hombre, huye. Diario de un preso FIES’. Un libro que marcó a toda una generación al relatar detalladamente las vejaciones, torturas, malos tratos y las duras condiciones de vida de los presos FIES, así como las fugas y motines que protagonizó.

Tarrío ingresó en prisión por delitos comunes, pero en la cárcel fue adquiriendo conciencia política anarquista, exadicto a la heroína y diagnosticado de SIDA, pasó 17 años en prisión, tiempo en el cuál recorrió muchos de los centros de exterminio del Estado español. Fue excarcelado en 2004 ante su deteriorado estado de salud, pero pasó sus últimos meses de vida en el hospital, en octubre de ese año entró en coma y falleció en Enero de 2005 a causa de una parálisis cerebral. Tras su muerte se realizaron manifestaciones a lo largo de todo el estado español.

Pastora

Su madre, Pastora, al leer el libro y ser consciente de la situación que estaba viviendo su hijo, regresó a Galicia desde Suiza, adonde había emigrado, para apoyar a su hijo e involucrarse en la lucha contra las cárceles llegando a convertirse en todo un referente en la denuncia de las torturas, los malos tratos y la propia existencia de las prisiones. Impulsora de la Asociación ‘Nais contra a impunidade’ (Madres contra la impunidad) continuó la lucha tras la muerte de su hijo, denunciando el sistema carcelario, la impunidad de carceleros y fuerzas de seguridad. Junto con sus compañeras de Nais contra a impunidade fue encausada por denunciar la muerte de un joven en el cuartel de la Guardia Civil en Arteixo y el encubrimiento que se hizo de esta muerte, finalmente las Nais fueron absueltas.

Luchadora incansable contra las cárceles, madre coraje, mujer solidaria de gran carácter y gran corazón, la muerte de Pastora dejó un vacío enorme en la lucha anticarcelaria y en el movimiento anarquista.