miércoles, 8 de mayo de 2019

La Inspección laboral investiga el uso fraudulento de becarios en las universidades españolas



Las universidades Pompeu Fabra y la Politècnica de Catalunya acaban de ser investigadas por la Inspección laboral. Hay que teminar por el vergonzoso uso fraudulento de los becarios en las facultades universitarias. Los inspectores laborales han indagado en varios campus universitarios para comprobar hasta que punto está extendida la figura del falso becario. Otro aspecto que afecta a la situación de los estudiantes en prácticas, estén o no estas dentro de los planes de estudios: la obligatoriedad de que coticen a la Seguridad Social.

Los estudiantes que trabajan en dependencias de la Universitat Pompeu Fabra con una beca de colaboración recibieron el pasado mes de abril un correo en el que la Inspección de Trabajo les pedía todos los detalles sobre las tareas que realizan. Horarios, formación, tutores... Desde hace más de un año, los inspectores del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social llevan a cabo campañas de oficio en distintos campus españoles para detectar si estos utilizan a becarios para cubrir puestos que deberían ser del Personal Administrativo y de Servicios.
El uso fraudulento de los becarios en las facultades universitarias afloró en 2017 con el caso de la Universidad Autónoma de Madrid, en la que la Inspección de Trabajo constató que había utilizado a 400 de sus estudiantes para ocupar puestos de trabajo ya existentes. Desde entonces, los inspectores laborales han indagado en varios campus universitarios para comprobar hasta que punto está extendida la figura del falso becario.

En total, en España había en 2013 –últimos datos disponibles por parte del Ministerio de Ciencia y Universidades-– unos 7.000 estudiantes con una beca de colaboración. Se trata de los alumnos que realizan tareas en principio formativas, de apoyo a los trabajadores de la universidad, en bibliotecas, archivos, aulas de informática, oficinas de orientación al estudiante y otras dependencias. Estos empleos deberían tener un plan educativo asociado, pero los estudiantes denuncian que a veces no es así.

Fuentes de la Inspección descartan dar detalles sobre qué universidades han sido investigadas y si se las ha sancionado o no, pero sí confirman que estas campañas se llevan a cabo desde "antes de 2018". Desde el Ministerio de Trabajo detectaron que la universidad era un sector en el que se dan casos de fraude en el empleo de estudiantes, aunque las mismas fuentes precisan que no existe una "incidencia particularmente alta" de falsos becarios en comparación con otros ámbitos laborales.

En los últimos meses, dos universidades catalanas han sido objeto de una investigación de oficio por parte de la Inspección de Trabajo: la Universitat Pompeu Fabra y la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC), según confirman ambas. Otras como la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) o la Universitat de Barcelona (UB) niegan haber recibido inspecciones de oficio. Con todo, esta última tuvo que indemnizar con 7.271,5 euros a una estudiante de Psicología que había denunciado que su beca no tenía ningún carácter formativo y otros dos de sus alumnos están a la espera de juicio por lo mismo, aunque no han acudido a Trabajo. 

Otro aspecto que afecta a la situación de los estudiantes en prácticas, estén o no estas dentro de los planes de estudios: la obligatoriedad de que coticen a la Seguridad Social. Los que tenían remuneración -como sucede en las becas de colaboración- ya cotizaban, no así muchos de los estudiantes que hacen prácticas curriculares.

De los 188 estudiantes haciendo prácticas extracurriculares en la UPF, 120 están en los servicios centrales (biblioteca e informática, principalmente) y 60 trabajan como asistentes de docencia y investigación. Así lo detallan fuentes de la universidad, que precisan que es la primera inspección de oficio que reciben en su historia. En Catalunya, la que tiene un mayor número de becarios de este tipo es la UB, con 930. En la UPC son 284 y en la UAB, tan sólo 59.