sábado, 29 de mayo de 2010

UGT Cádiz: Crónicas de un chorizo


Aunque la Comisión de Garantías Confederal de UGT no consideró suficientemente probada dichas acusaciones, las facturas por el uso del teléfono móvil "para cuestiones ajenas al trabajo sindical; el posible uso del vehículo asignado a Pedro Custodio González para fines particulares y el gasto producido a través de las tarjetas de crédito en cuestiones que nada tienen que ver con la gestión sindical," dejan lugar a pocas dudas.

En el dossier de sus acusadores, conocido por la dirección nacional ugetista, están incluidas las operaciones dudosas de Custodio. La Comisión de Garantías ya dejó caer que no veía nada claro el asunto a pesar de considerar no probados los hechos. Tómese nota de esta declaración: "Efectivamente, puede considerarse que hay ciertos gastos en UGT-Cádiz de difícil respuesta desde el ámbito estrictamente sindical, que deberían haber sido controlados, investigados y suprimidos por los órganos responsables de estas incidencias; también hay que constatar que la auditoría directa del denunciado no ha sido suficientemente probada por la extensa documentación ni por las alegaciones presentadas por los denunciantes; muy al contrario, los testigos propuestos por el denunciado manifiestan su no implicación, por lo que a esta Comisión se le hace imposible presentar un pliego de cargos contra el compañero denunciado". E hipócritamente añadía: "A esta CGC le preocupa enormemente que el dinero de la organización pueda ser malgastado en otras cuestiones que no sean directamente sindicales"
El dossier de las acusaciones contra Custodio, los denunciantes dicen que este "compañero" "ha abusado de las competencias y prerrogativas del cargo de secretario general en aquellos aspectos relacionados con nuestra denuncia y que se concretan en el uso con fines lúdicos y particulares de los medios puestos a su disposición por la organización con el único objetivo de la eficaz realización de sus obligaciones ejecutivas y no para satisfacer sus necesidades o intereses personales".

En concreto se ciñen a tres casos:
El caso del coche: Se trata de viajes injustificados relacionados con la visita que Custodio hacía a sus padres en Villanueva de la Serena, pero cuyos gastos de combustible cargaba al "sindicato" colaboracionista. En el anexo, aportan los cargos de la tarjeta desde noviembre de 2007 a octubre de 2008. Además, existían viajes desconocidos a Marbella, El Puerto, Valencia o Cádiz, casi siempre los fines de semana.

El caso de las copas: Hay cargos en la tarjeta amparada por la UGT de Cádiz en la discoteca Barabass, en el pub El Buccan, en cafeterías de El Puerto, en La Marea de Cádiz, en la marisquería de Málaga El Caleño. hasta en el Hipercor Bahía de Cádiz hay cargos sin justificar.

El caso del teléfono: Al parecer se producían accesos a "contenidos especiales" como chats, citas a ciegas, Play Boy y otros.

Tras el archivo de la denuncia por la CGC, los denunciantes han recurrido y esperan un pronunciamiento no antes de tres meses.