El próximo 5 y 6 de septiembre Mariano Rajoy visitará la Federación Rusa, con motivo de la reunión del G-20 en San Petersburgo. ¿ Reclamará o defenderá algunas de las principales preocupaciones en derechos humanos, como el deterioro de la libertad de expresión y los derechos de reunión y asociación, que están sufriendo un grave deterioro en Rusia tras la aprobación de una serie de iniciativas legislativas en los últimos meses? ...
El menoscabo y la violación del derecho a la libertad de expresión, reunión y asociación ha sido el sello distintivo del presidente ruso, Vladimir Putin, desde que volvió a la presidencia. Se han adoptado leyes que limitan la libertad de reunión, estigmatizan a la comunidad LGBTI, criminalizan los insultos a los sentimientos religiosos de los creyentes y amplían las definiciones de traición y espionaje para poder criminalizar el activismo por los derechos humanos.
La blasfemia como delito
La última norma en ser aprobada, el 1 de julio, tipifica como delito la blasfemia, e impone multas de hasta 500.000 rublos y hasta tres años de prisión por actos públicos que no respeten u ofendan las creencias religiosas en lugares de culto. De cometerse en otros lugares, el delito estaría penado con hasta un año de cárcel y una multa de hasta 300.000 rublos. La legislación sobre blasfemia discrimina en la práctica a los no creyentes, tiene como fin castigar las críticas contra dirigentes religiosos o los comentarios sobre la doctrina religiosa o el dogma.
Esta vía legislativa que ataca la libertad de conciencia se ha llevado a cabo tras el juicio y condena en 2012 de las tres integrantes del grupo Pussy Riot (dos de las cuales continúan recluidas), a raíz de la interpretación de su canción protesta en una catedral ortodoxa en Moscú. La organización Amnistía Internacional las considera presas de conciencia y exige su liberación inmediata y sin condiciones, ¿ Le interesará al Presidente Rajoy su caso durante la visita ?
Crímenes homófobos
Otra de las leyes que deterioran la libertad de expresión es la aprobada el pasado 30 de junio, dirigida contra el colectivo de personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales (LGBTI). La ley prohíbe la “propaganda de relaciones sexuales no tradicionales” que, según afirma, puede corromper moralmente a los menores, e impone multas muy elevadas. Esta ley aumentará los niveles de discriminación y hostigamiento contra las personas LGBTI en la sociedad rusa.
¿Exigirá Rajoy al gobierno ruso garantías para que los recientes ataques homófobos sean investigados adecuadamente y los culpables llevados ante la justicia.
Castigar el activismo
A éstas leyes se suman otras como la que entró en vigor en abril de 2013 que obliga a registrarse como “agentes extranjeros” a las ONG que reciban fondos de otros países si su actividad puede considerarse política, algo que en la ley se define de manera muy laxa. Organizaciones independientes de todo el país, son sometidas a presiones, intimidaciones, acoso y a campañas de difamación por parte de las autoridades como consecuencia de esta medida.
Por otra parte, la sociedad rusa también ha visto incrementada la dificultad para convocar manifestaciones, con las medidas legislativas que aumentan las sanciones para los organizadores en caso de incidentes, o las que hablan sobre espionaje y traición, que puede utilizarse fácilmente para procesar a defensores y defensoras de los derechos humanos y activistas, así como la ley sobre la difamación, que inhibe las críticas legítimas del gobierno o de los funcionarios.
¿Incluirá todos estos asuntos de derechos humanos en la agenda de su visita, el Jefe del Ejecutivo español?... Exigimos y hacemos campaña en favor de la derogación de todas estas leyes promulgadas para reprimir la libertad de expresión, reunión y asociación en Rusia.