Antoine Nieto Galindo, preso 40
años en España… al que aún le esperan 2 cadenas perpetuas en Francia.
Antoine Nieto Galindo fue sentenciado a 50 años, 4 meses y 16 días, de
los cuales, según cálculos del mismo y afines, ¡YA ESTÁ CUMPLIDO!
La cadena perpetua no ha desaparecido en España, sino que se ha encubierto en este circo al que se conoce como democracia, y un claro ejemplo de ello es Antoine Nieto Galindo, preso 40 años en España… al que aún le esperan 2 cadenas perpetuas en Francia. Antoine Nieto Galindo fue sentenciado a 50 años, 4 meses y 16 días, de los cuales, según cálculos del mismo y afines, ¡YA ESTÁ CUMPLIDO! Y pese a ello, sigue secuestrado entre los 4 muros que el estado le impuso por vivienda fija, incluso bajo la amenaza de ser extraditado a Francia, con 2 cadenas perpetuas esperando (se ve que los altísimos entendidos en derechos, humanidad y democracia no les parecía bastante con ponerle una vida entera en prisión…) de las cuales no pudo defenderse en juicio por hallarse preso en España y no permitirle asistir a su propio juicio. Sin duda este montaje entre estados supone un castigo cruel y severo, pues el día a día en las cárceles donde la comida es de mala calidad o caducada, salvo que te permitas el lujo de comprar en el economato; las bibliotecas apenas tienen libros; los gimnasios tiene maquinas rotas o no te dejan pasar; las piscinas ni las ven, etc… conlleva que tarde o temprano tengas enfermedades.
El horrible crimen cometido por nuestro compañero es el peor de todos a ojos de cualquier estado, el único que no se puede perdonar y menos a un pobre: robar un banco.
El horrible crimen cometido por nuestro compañero es el peor de todos a ojos de cualquier estado, el único que no se puede perdonar y menos a un pobre: robar un banco.
Los ataques al capitalismo efectuados en Francia y España le han valido la sentencia de encierro perpetuo, aun siendo encubierto como se hace en el caso de España. Es curioso cómo cambia el futuro de una persona si al robar lo hace un millonario desde un cómodo puesto y movido por avaricia, y el destino que le espera a un pobre que por necesidad, pobreza, o simplemente odio a los ladrones (banca, estado, empresarios….) decide recuperar lo robado.
Conociendo las crueldades de cualquier estado y su inmoralidad, nos negamos a cerrar los ojos ante estos casos, y sobre todo, nos negamos a mantener un modelo de tortura social como supone la cárcel, que poco o nada tiene que envidiarle a un campo de exterminio nazi o soviético. Por ello llamamos a la solidad, empatía y coherencia de la sociedad para exigir la inmediata libertad de nuestro compañero, ya cumplido.
Comité Pro-Presos CNT-AIT
Confederación Regional de Levante
