Eso sí, que se hagan contratos indefinidos no quita que sean contratos precarios e inestables, ni elimina las horas extras, ni los sueldos de miseria...
Tras las cartas enviadas por la Inspección de Trabajo a empresas por posibles fraudes en la contratación de unos 80.500 trabajadores temporales, las compañías han convertido en indefinidos a más de 46.500 empleados durante el mes de agosto. Un 57,8% del total de puestos sobre los que advirtió la autoridad laboral.
La titular del Ministerio Magdalena Valerio ha celebrado el resultado, que aunque pueda ser "una gota de agua en el océano de precariedad, pero da idea del compromiso del Gobierno de cambiar las cosas y la decisión de algunas empresas de replantearse las políticas de contratación".
La ministra ha reconocido el problema de temporalidad excesiva que afronta el mercado laboral español y que situó al país en 2017 como líder de la Unión Europea en esta materia, con una tasa del 26,8%. La media de la UE fue 14,3%. Una de las secuelas que está dejando la temporalidad es el gran aumento de los contratos temporales más precarios: los de menos de siete días, que se han duplicado respecto al inicio de la crisis.
El resultado presentado este jueves es el segundo que el Gobierno comunica sobre el Plan Director por un Trabajo Digno, aprobado a finales de julio. Las misivas enviadasade la Inspección han permitido también aflorar por el momento 8.000 falsos autónomos, otro de los abusos laborales que aborda este programa.
Dentro del Plan Director, el Ministerio de Trabajo lanzó dos planes de choque (contra la contratación temporal y el trabajo a tiempo parcial fraudulentos) que tienen una primera fase de detección de posibles situaciones irregulares a través de la "herramienta de lucha contra el fraude". En esta fase se encuadra el envío de cartas informativas a las empresas: en total a lo largo del mes de agosto se enviaron más de 81.000 cartas que afectaban a más de 130.000 trabajadores.
Según ha explicado Magdalena Valerio, la Inspección de Trabajo detectó posibles imcumplimientos de la legislación laboral a propósito de 80.529 trabajadores eventuales, por sobrepasar el tiempo legal establecido para la contratación temporal. La autoridad laboral envió las cartas informativas a las empresas contratantes y las compañías convirtieron en trabajadores indefinidos a 46.554 personas.
El Ministerio aún no ha aportado datos sobre las repercusiones que han tenido las comunicaciones sobre posibles abusos en la contratación a tiempo parcial.
Según explicó Trabajo en la puesta en marcha de estos planes de choque, tras el envío de cartas entra en juego una segunda fase. Una vez transcurrido un mes desde el envío de las comunicaciones, la Inspección de Trabajo analizará los datos y comportamientos de las citadas empresas, "en concreto de aquellas que no han regularizado la situación descrita o han realizado alguna modificación en la situación de sus plantillas procediendo a la extinción de los contratos detectados en fraude de ley".
La titular del Ministerio Magdalena Valerio ha celebrado el resultado, que aunque pueda ser "una gota de agua en el océano de precariedad, pero da idea del compromiso del Gobierno de cambiar las cosas y la decisión de algunas empresas de replantearse las políticas de contratación".
La ministra ha reconocido el problema de temporalidad excesiva que afronta el mercado laboral español y que situó al país en 2017 como líder de la Unión Europea en esta materia, con una tasa del 26,8%. La media de la UE fue 14,3%. Una de las secuelas que está dejando la temporalidad es el gran aumento de los contratos temporales más precarios: los de menos de siete días, que se han duplicado respecto al inicio de la crisis.
El resultado presentado este jueves es el segundo que el Gobierno comunica sobre el Plan Director por un Trabajo Digno, aprobado a finales de julio. Las misivas enviadasade la Inspección han permitido también aflorar por el momento 8.000 falsos autónomos, otro de los abusos laborales que aborda este programa.
Dentro del Plan Director, el Ministerio de Trabajo lanzó dos planes de choque (contra la contratación temporal y el trabajo a tiempo parcial fraudulentos) que tienen una primera fase de detección de posibles situaciones irregulares a través de la "herramienta de lucha contra el fraude". En esta fase se encuadra el envío de cartas informativas a las empresas: en total a lo largo del mes de agosto se enviaron más de 81.000 cartas que afectaban a más de 130.000 trabajadores.
Según ha explicado Magdalena Valerio, la Inspección de Trabajo detectó posibles imcumplimientos de la legislación laboral a propósito de 80.529 trabajadores eventuales, por sobrepasar el tiempo legal establecido para la contratación temporal. La autoridad laboral envió las cartas informativas a las empresas contratantes y las compañías convirtieron en trabajadores indefinidos a 46.554 personas.
El Ministerio aún no ha aportado datos sobre las repercusiones que han tenido las comunicaciones sobre posibles abusos en la contratación a tiempo parcial.
Según explicó Trabajo en la puesta en marcha de estos planes de choque, tras el envío de cartas entra en juego una segunda fase. Una vez transcurrido un mes desde el envío de las comunicaciones, la Inspección de Trabajo analizará los datos y comportamientos de las citadas empresas, "en concreto de aquellas que no han regularizado la situación descrita o han realizado alguna modificación en la situación de sus plantillas procediendo a la extinción de los contratos detectados en fraude de ley".