La Asociación Gallega Contra el Acoso Moral en el Trabajo (Agacamt) asegura que la situación de las víctimas gallegas es peor que en otras comunidades autónomas porque el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) sólo condenó en 2008 al 10 por ciento de los acosadores denunciados, frente al 30 por cien de media registrado en el resto de España.
La presidenta de Agacamt, Eva Ventín, explicó que su colectivo cuenta con 250 víctimas de acoso laboral asociadas y recibe una media de tres denuncias semanales por este motivo. "Pero de las 25 que llegaron en 2008 al TSXG, sólo el 10% se saldó con la condena judicial del acosador".
Según Ventín, ese dato "simboliza" la situación de las víctimas de mobbing en la sociedad, ya que después de sufrir una violencia "invisible", el acosado es víctima de un "crimen perfecto" difícil de probar, que consiste en una "presión laboral reiterada y tendente a la autoeliminación de un trabajador mediante su denigración".
No hay estudios científicos sobre acoso laboral, pero la estimación de Agacamt indica que el 80 por ciento de las víctimas que denuncian trabaja en sectores públicos. "Y se da un número especialmente mayor en las oficinas de urbanismo de los ayuntamientos gallegos, sobre todo en épocas de cambio de Gobierno", agregó.
La presidenta de Agacamt, Eva Ventín, explicó que su colectivo cuenta con 250 víctimas de acoso laboral asociadas y recibe una media de tres denuncias semanales por este motivo. "Pero de las 25 que llegaron en 2008 al TSXG, sólo el 10% se saldó con la condena judicial del acosador".
Según Ventín, ese dato "simboliza" la situación de las víctimas de mobbing en la sociedad, ya que después de sufrir una violencia "invisible", el acosado es víctima de un "crimen perfecto" difícil de probar, que consiste en una "presión laboral reiterada y tendente a la autoeliminación de un trabajador mediante su denigración".
No hay estudios científicos sobre acoso laboral, pero la estimación de Agacamt indica que el 80 por ciento de las víctimas que denuncian trabaja en sectores públicos. "Y se da un número especialmente mayor en las oficinas de urbanismo de los ayuntamientos gallegos, sobre todo en épocas de cambio de Gobierno", agregó.
