Tal y como estaba anunciado en la jornada de ayer miércoles, se llevó a cabo la inauguración de la calle dedicada a Soledad Candón Macías 'La Abanderada'.
La homenajeada nació en Paterna de la Rivera en 1889 y se trasladó a Chiclana a los pocos años de edad. Estuvo casada con Antonio Sacudedo Aragón 'El Pujío' y tuvo cinco hijos: Juan Manuel, Enrique, Ana, María Teresa y Fernando. Fue una mujer luchadora y defensora de los más desfavorecidos, militante anarcosindicalista. Su apodo se deriva de que siempre encabezaba las numerosas manifestaciones obreras con la bandera roja y negra de la CNT ( Confederación Nacional del Trabajo ) los primero de mayo por varias calles de Chiclana, para al final dirigirse al Pino Gordo que estaba situado entre el Polvero y la carretera del Marquesado donde realizaban una jornada de confraternización obrera.
Soledad residía junto con su familia en un caserón que tenían en unos terrenos junto al Santo Cristo, en Chiclana, donde criaba cabras y atendía las labores del campo. Era amiga de María Silva 'La libertaria' y de toda la familia de Francisco Cruz 'Seis dedos' a los que acogía solidariamente en su vivienda cuando se trasladaban desde Casas Viejas para vendimiar.
En los primeros días del golpe de Estado por parte de las fuerzas fascistas, Soledad fue detenida junto con compañer@s militantes de la CNT. Estando en la cárcel incluso llegaron a obligarla a presenciar un fusilamiento. Fue puesta en libertad el 8 de septiembre de 1936.
Soledad fue una mujer culta y autodidacta, muy comprometida con las ideas libertarias lo que le costó numerosas detenciones que provocaron situaciones muy difíciles para ella y para su familia. Una vez instaurada y consolidada la dictadura, Soledad continuó su lucha reuniéndose en más de una ocasión clandestinamente con compañer@s anarcosindicalistas. Murió el 1956 en un accidente de tráfico en Vigo, donde había ido a visitar a una hija.
“A pesar de la represión, del miedo, ella siguió luchando por un mundo mejor, sin explotación y a salvo del hambre y de la guerra, un mundo basado en el respeto mutuo, la libertad, la justicia y la igualdad entre todos los seres humanos”, se destacó ayer durante el acto de inauguración de la calle que lleva su nombre en la barriada obrera de La Carabina, junto al Archivo Municipal y al que ha asistió una amplia representación de su familia.
Es de recordar que en el pasado 2005 se homenajeó a la destacada militante de la CNT-FAI, Federica Montseny, y desde la fecha una plaza de la localidad chiclanera lleva su nombre inscrito en un monolito.
La homenajeada nació en Paterna de la Rivera en 1889 y se trasladó a Chiclana a los pocos años de edad. Estuvo casada con Antonio Sacudedo Aragón 'El Pujío' y tuvo cinco hijos: Juan Manuel, Enrique, Ana, María Teresa y Fernando. Fue una mujer luchadora y defensora de los más desfavorecidos, militante anarcosindicalista. Su apodo se deriva de que siempre encabezaba las numerosas manifestaciones obreras con la bandera roja y negra de la CNT ( Confederación Nacional del Trabajo ) los primero de mayo por varias calles de Chiclana, para al final dirigirse al Pino Gordo que estaba situado entre el Polvero y la carretera del Marquesado donde realizaban una jornada de confraternización obrera.
Soledad residía junto con su familia en un caserón que tenían en unos terrenos junto al Santo Cristo, en Chiclana, donde criaba cabras y atendía las labores del campo. Era amiga de María Silva 'La libertaria' y de toda la familia de Francisco Cruz 'Seis dedos' a los que acogía solidariamente en su vivienda cuando se trasladaban desde Casas Viejas para vendimiar.
En los primeros días del golpe de Estado por parte de las fuerzas fascistas, Soledad fue detenida junto con compañer@s militantes de la CNT. Estando en la cárcel incluso llegaron a obligarla a presenciar un fusilamiento. Fue puesta en libertad el 8 de septiembre de 1936.
Soledad fue una mujer culta y autodidacta, muy comprometida con las ideas libertarias lo que le costó numerosas detenciones que provocaron situaciones muy difíciles para ella y para su familia. Una vez instaurada y consolidada la dictadura, Soledad continuó su lucha reuniéndose en más de una ocasión clandestinamente con compañer@s anarcosindicalistas. Murió el 1956 en un accidente de tráfico en Vigo, donde había ido a visitar a una hija.
“A pesar de la represión, del miedo, ella siguió luchando por un mundo mejor, sin explotación y a salvo del hambre y de la guerra, un mundo basado en el respeto mutuo, la libertad, la justicia y la igualdad entre todos los seres humanos”, se destacó ayer durante el acto de inauguración de la calle que lleva su nombre en la barriada obrera de La Carabina, junto al Archivo Municipal y al que ha asistió una amplia representación de su familia.
Es de recordar que en el pasado 2005 se homenajeó a la destacada militante de la CNT-FAI, Federica Montseny, y desde la fecha una plaza de la localidad chiclanera lleva su nombre inscrito en un monolito.
