El 40% de las enfermedades profesionales sufridas por los trabajadores riojanos entre los meses de enero y agosto de 2007 fueron diagnosticadas por sus respectivas Mútuas de Accidentes de Trabajo como enfermedades comunes, y derivadas por éstas (junto a los costes de los tratamientos) al Servicio Riojano de Salud. Así lo recoge un informe realizado por la Seguridad Social en septiembre de ese año.
Esta práctica, viene siendo habitual desde los años 2006 y 2007, momento en que entraron en vigor, mediante Decreto, el nuevo cuadro de enfermedades profesionales y el nuevo proceso de notificación de las mismas, que pasaba a ser cometido de las propias mútuas, en lugar de los empresarios (como venía siendo desde el año 1978).
Esta mala praxis de las mútuas, se añade a la propia falta de información y desconocimiento de los trabajadores. Según datos, los años 2004 y 2005 se cerraron respectivamente con 385 y 406 casos diagnosticados de enfermedad profesional, en 2006 (a partir del nuevo decreto), la cifra bajó a 289 casos, y e 2007 hasta los 164 casos.
Estas infradeclaraciones han supuesto al SERIS en La Rioja un desembolso en torno a los 37 millones de euros al año en servicios médicos que no le corresponden, y de los que deberían haberse hecho cargo las mútuas y la Seguridad Social. El mal, extendido por toda España, significa globalmente el 14% del presupuesto anual, según los datos aportados, de los servicios públicos sanitarios.
Esta práctica, viene siendo habitual desde los años 2006 y 2007, momento en que entraron en vigor, mediante Decreto, el nuevo cuadro de enfermedades profesionales y el nuevo proceso de notificación de las mismas, que pasaba a ser cometido de las propias mútuas, en lugar de los empresarios (como venía siendo desde el año 1978).
Esta mala praxis de las mútuas, se añade a la propia falta de información y desconocimiento de los trabajadores. Según datos, los años 2004 y 2005 se cerraron respectivamente con 385 y 406 casos diagnosticados de enfermedad profesional, en 2006 (a partir del nuevo decreto), la cifra bajó a 289 casos, y e 2007 hasta los 164 casos.
Estas infradeclaraciones han supuesto al SERIS en La Rioja un desembolso en torno a los 37 millones de euros al año en servicios médicos que no le corresponden, y de los que deberían haberse hecho cargo las mútuas y la Seguridad Social. El mal, extendido por toda España, significa globalmente el 14% del presupuesto anual, según los datos aportados, de los servicios públicos sanitarios.