sábado, 25 de agosto de 2007

Y... ¿ Quién se extraña ?


Un delegado de CCOO declara a favor de la empresa y en contra de la CNT en un juicio por despido
El juez de lo Social número Dos de Córdoba considera el testimonio de un
delegado de CCOO como el“más cualificado” para no resolver a favor de latrabajadora en un caso de represión sindical. El delegado consideró como“pegos” las quejas de las trabajadoras.

El día 17 del pasado mes de abril, Miriam fue despedida por la empresa parala que trabajaba, Indusal Alandalus S.L., una de las mayores empresas delavandería industrial de la ciudad. Miriam cubría la excedencia de unacompañera que se reincorporó, razón que arguyó la empresa para prescindir deella. La trabajadora, afiliada a la CNT, que mantenía en aquellos momentos
un duro conflicto con la empresa, demandó al juzgado solicitando despidonulo por represión sindical. La sentencia que ahora se conoce lo consideratan solo improcedente -pero no nulo-, y ello por una razón fundamental: eltestimonio del delegado de CCOO.

En marzo de este año, la Sección Sindical de CNT planteó una serie dereinvidicaciones a Indusal para conseguir la mejora de las pésimascondiciones de trabajo en la planta. La respuesta de la empresa fue lanegativa a negociar con el sindicato, el acoso y discriminación de lastrabajadoras de la Sección Sindical y además, el despido de Miriam. Frutoademás de este acoso, otra de las trabajadoras está de baja por depresión ya la espera de sentencia tras haberse celebrado juicio por mobbing.

El hecho de que una empresa lleve al delegado de un sindicato como testigocontra una trabajadora es bastante inusual, pero aún llama más la atenciónel contenido de su testimonio. En el juicio, las trabajadoras expusieron elaislamiento y la hostilidad que han padecido desde su afiliación alSindicato. Preguntado sobre estos hechos, el delegado de CCOO - consideradopor el juez como el testigo “más cualificado”-, se refirió a la “existenciade rencillas entre compañeras, así como que a él no le han hecho llegar lamás mínima queja ”.

Según figura en las actas del juicio, el delegado de CCOO afirmó “que recibequejas de trabajadoras de todos los sindicatos por pegos, pero no por tratodiscriminatorio”.

Estas declaraciones, que rebajaban las quejas de las trabajadoras a la
categoría de “pegos”, dan pie al juez para dar como no probada la represiónsindical sufrida porlas trabajadoras. Por su parte, la CNT ha anunciado yala intención de recurrir la sentencia al TSJA.

Curioso resulta también que mientras se estaban desarrollando los hechosjuzgados, no se habían celebrado aún elecciones sindicales y por tanto, elactual delegado de CCOO aún no había sido elegido, hecho que no ha sidotenido en cuenta por el juez.

Una empresa sin sindicatos

Indusal Alandalus pertenece a un grupo que opera a nivel nacional en elsector. Una empresa que lava la ropa de los hospitales de Montilla y PuenteGenil y de los mejores hoteles o restaurantes de Córdoba, como el HotelBailío, el AC y El Bandolero. Un negocio de alto nivel que sin embargo, noparecen compartir sus trabajadores, en su mayoría mujeres y madres algunas
de ellas.

La situación laboral en que se encontraban cuando comenzaron susreivindicaciones era pésima. Jornadas de más de doce horas, graves carenciasen materia de seguridad e higiene, disponibilidad total de horarios, horasextras realizadas por obligación y un largo etcétera que culmina con elsalario que perciben: 570 euros mensuales, es decir, el salario mínimo. Noobstante, ningún sindicato tenía presencia hasta que apareció CNT.

Tres días después de comunicar CNT a la empresa la constitución de laSección Sindical, UGT presentó el preaviso de elecciones sindicales.
“Habiendo gente de CCOO y de UGT en la empresa, ninguno ha querido mover niun dedo por nosotras hasta que no han aparecido los de la CNT. ¿de quién sonlos sindicatos, nuestros o de la empresa? ”, se lamentaba una trabajadora enla última de las movilizaciones realizadas.

A lo largo del conflicto mantenido por CNT se han conseguido importantesmejoras gracias a la presión realizada. No obstante, al día de hoy sigue sinhaber convenio colectivo y se cobra tan sólo el salario mínimo. El sindicatoha interpuesto denuncias de la situación ante la Inspección de Trabajo y la Delegación de Salud de la Junta de Andalucia, como responsable de loshospitales que lavan su ropa en Indusal, sin que éstas hayan tenidorespuesta hasta el momento.

CNT-AIT CORDOBA