Esta invasión a la intimidad es inédita en países de nuestro entorno, donde sólo Alemania cuenta con una legislación similar pero sólo para delitos de terrorismo. El Partido Popular sigue una agenda oculta en la que han convertido al ciudadano corriente en el enemigo público nº 1, al que hay que quitarle el trabajo, el sustento, la dignidad y la libertad.
El borrador del anteproyecto del Código Procesal Penal (el mismo en el que se estudia incluir una "Ley mordaza" ) incluye además, otro aspecto: Alberto Ruiz Gallardón, ministro de Justicia, donde los haya, incluirá la posibilidad de que los jueces autoricen a la policía a instalar troyanos en los ordenadores de los investigados para obtener la información que contienen. Según el texto, se podrá acceder de manera remota a los equipos informáticos –no sólo ordenadores, también tabletas y smartphones-. Esto será aplicable para delitos dolosos con penas máximas superiores de 3 años, para el cibercrimen , terrorismo, crimen organizado; y será el juez el encargado de justificar la proporcionalidad de la intervención.
El artículo 350 del borrador permite al Tribunal de Garantías la "autorización a petición razonada del ministerio público de la utilización de datos de identificación y códigos, así como la instalación de un software, que permitan, de forma remota y telemática, el examen a distancia y sin conocimiento del titular o usuario del contenido de un ordenador". Lo cual no es otra cosa que un troyano, un programa malicioso que en este caso se utilizará para "fines legítimos".
Este borrador aún no ha sido aprobado para incluirse al anteproyecto, y según ha asegurado un portavoz de Justicia, "escucharemos con atención lo que nos digan sobre este asunto, pero no tomaremos la decisión hasta que hayamos analizado las conclusiones que nos hagan llegar desde distintos ámbitos y colectivos".
Si se aprueba, el acceso de la Policía a los datos personales es infinito: contraseñas, redes sociales, correo electrónico, webs visitadas, cuentas bancarias...