miércoles, 23 de mayo de 2012

Mejor sin pechos

Lauren Odes ha sido despedida porque su gran pecho causaba "distracción entre el personal de su lugar de trabajo. Ante esta situación su jefa le recomendó en varias ocasiones que usara celo para aplastárselos un poco, según ABCNews.
Lauren Odes, una joven de 29 años, trabajaba para una empresa de lencería de judíos ortodoxos en Manhattan. Tras ser despedida, la exempleada los ha demandado por discriminación sexual y religiosa.
Lauren Odes, que trabajaba como administrativa en las oficinas de la compañía, recibió la primera advertencia dos días después de ser contratada. Su supervisora le dijo que los dueños no estaban contentos con su forma de vestir, porque provocaba demasiada "distracción". "Cuando empecé a trabajar allí, pregunté si existía un código para el atuendo diario de los empleados, y me dijeron que bastaba que mirase alrededor y ver lo que todo el mundo llevaba", afirmó Lauren Odes a los medios. "Así lo hice. Me puse ropa casual y deportiva", explicó la exempleada.
La mujer dijo a la prensa, cuando anunció la demanda, que su ropa les ofendía, porque los dueños de la tienda eran judíos ortodoxos. "Cuando mi supervisora me sugirió que me aplastara mis pechos, le pregunté que si estaba bromeando. Entonces, se acercó a un armario y sacó una bata de color rojo brillante, decorada con imágenes de guitarras".
"Me dijo que me sentara en mi escritorio y la llevara todo el día. Me sentí humillada", contó Odes. También le dio la opción de ir a comprar un suéter "que le llegara a los tobillos". La joven empleada narra como se sentó en el baño un rato para llorar, mientras sus compañeros se burlaban de ella. Así que prefirió salir a comprar el suéter y cuando regresó la llamaron para comunicarle que su contrato había terminado.
Odes se lamentó ante la prensa y recriminó la actitud de sus jefes al tratar de "imponer sus creencias religiosas". 
 
Y si de vez de ponerse celo en los pechos, se hubiera puesto el jefecito dos parches en los ojos como los caballos ??? El problema lo tiene él, no ella.