martes, 15 de julio de 2014

USA: Cómo favorecer el "trabajo de francotiradores"



Las balas siguen siendo la principal causa de fallecimiento en Estados Unidos muy por encima de las provocadas por cuchillos u otras armas cortantes, que es la segunda. Lejos de invertir en gastos sociales se gastan miles de dólares en el diseño e investigación de una bala que corrige su rumbo, lo que "favorecería el trabajo de francotiradores".

Según los datos manejados por el FBI, en 2011, 8.583 personas murieron por un arma de fuego, frente a las 10.158 que se registraron en 2005. La cifra es cinco veces superior a la de los fallecimientos por cuchillos y armas cortantes, 1.694 en 2011, la segunda causa de muertes en el país, que también ha descendido respecto de 2005 (11%). De acuerdo con el FBI, en EE UU cada 25,3 segundos se produce un crimen violento.

La Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa de EEUU (DARPA, en inglés) ha probado con éxito por primera vez una bala que corrige su rumbo para impactar en el objetivo, algo que facilitaría las misiones de los francotiradores, y nos tememos que no sólo en campos de batalla..

El proyecto Extreme Accuracy Tasked Ordnance (EXACTO) mejora la precisión de los francotiradores gracias a una avanzada munición del calibre 12.7 milímetros que puede maniobrar en pleno vuelo.

En un vídeo revelado recientemente (Clik aquí para ver el video), DARPA muestra el resultado de una prueba realizada la pasada primavera en la que se puede comprobar cómo el proyectil corrige la trayectoria para impactar en el objetivo inicial.

"Para los francotiradores conseguir disparar contra objetivos en movimiento en condiciones no favorables, tales como fuertes vientos y en terreno polvoriento, como en Afganistán, es extremadamente complicado", explica en un comunicado la agencia DARPA.

Las balas EXACTO funcionan tanto de día como de noche, aumentando la "capacidad" mortífera de los francotiradores. El sistema combina un sistema óptico de guía automático y actuadores aerodinámicos, sensores y un sistema electrónico integrado en la bala para que el proyectil pueda realizar pequeñas correcciones tras el disparo, hasta 30 por segundo.

El Pentágono va a comenzar ahora la segunda fase de este proyecto, para que esta tecnología pueda ser utilizada en el campo de batalla... Y por ende, en miles de hogares y ciudades norteamericanas.