Entre los trabajadores de la Fundación Andalucía Emprende ha figurado la ex
delegada de Empleo en Jaén Irene Sabalete, quien tan sólo un mes antes de las elecciones
autonómicas del año 2012, Sabalete les decía a los trabajadores "os quiero a
todos en la calle haciendo campaña por el PSOE" porque "si no ganamos
las elecciones no vais a seguir trabajando en la Junta de Andalucía".
La Cámara de Cuentas de Andalucía ha detectado que el 80 por ciento
de la plantilla -764 trabajadores sobre un total de 955- de un ente que forma
parte de la conocida como "administración paralela" de la Junta fue contratado "a dedo" y sin respetar los principios que rigen el acceso a la
función pública: principios de igualdad, mérito, capacidad y publicidad.
La Consejería de Economía y Conocimiento, de la que depende el organismo
fiscalizado por la Cámara de Cuentas -la Fundación Andalucía Emprende-,
respondió que no debe hacer una "traslación absoluta" a esta fundación de la
Junta de los principios que se le exigen "a las administraciones públicas" en
la selección del personal a su servicio.
En este documento, difundido este viernes, la Cámara de Cuentas fiscaliza el
año 2015 en la Fundación Andalucía Emprende, cuando hubo una plantilla media de
955 trabajadores. En ese periodo, el 88% del total de las subvenciones
nominativas concedidas por el Gobierno andaluz sirvió para pagar las
nóminas de su personal.
De los 764 empleados contratados "a dedo", la Cámara de Cuentas distingue
los 740 procedentes de las extintas Unidades Territoriales de Empleo y
Desarrollo Local y Tecnológico que se incorporaron a la Fundación
Andalucía Emprende en 2009, a pesar de que "no queda constancia documental que
acredite el cumplimiento de los principios de igualdad, mérito,
capacidad y publicidad en el momento del acceso al sector público
andaluz".
Los 24 restantes son casos de trabajadores contratados por la Fundación en
los que "no se ha localizado la documentación que indique el proceso de
selección utilizado para su incorporación, no pudiéndose acreditar
que la selección se haya realizado mediante procedimientos que garanticen la
igualdad, mérito, capacidad y publicidad", recogidos en la ley, dice el
informe.
A una fundación no se le debe exigir lo mismo que a las
administraciones públicas a la hora de contratar personal, según la Junta de Andalucía, que
alega que la exigencia de igualdad "no tiene por qué suponer la
publicación en boletín oficial alguno, así como tampoco la imposición
de mecanismos tradicionales, como pudiera ser la publicación en prensa diaria". Vergonzoso.