Ahora entendemos lo de que "los jueces tienen poderes..."
La jueza de Vigilancia Penitenciaria de Lugo, María Jesús García, está siendo investigada sobre la posibilidad de que cuente con una consulta de tarot y videncia. Es ella misma la que echa las cartas en un piso de la Avenida Ramón Ferreiro, cobrando entre 15 y 20 euros por sesión. Además, ella se encargaría de repartir por los parabrisas de los vehículos aparcados en la zona los pasquines en los que se anuncian sus servicios: "Tarotista y vidente con gran experiencia echa las cartas del tarot en persona".
El Tribunal Superior de Justicia de Galicia (TSXG) y el Consejo General del Poder Judicial han abierto ya un expediente informativo, un proceso que se inició a principios de mes con un informe remitido desde Lugo al TSXG, que además de comenzar su investigación, trasladó el asunto al Consejo General del Poder Judicial
María Jesús García es la encargada de gestionar los permisos de libertad de más de mil internos e internas de tres cárceles de Lugo y Ourense. En los últimos años había sido ya muy comentado el hecho de que se hiciera acompañar por un gato en sus vistas, y había recibido quejas igualmente por fumar en los juicios.
La jueza de Vigilancia Penitenciaria de Lugo, María Jesús García, está siendo investigada sobre la posibilidad de que cuente con una consulta de tarot y videncia. Es ella misma la que echa las cartas en un piso de la Avenida Ramón Ferreiro, cobrando entre 15 y 20 euros por sesión. Además, ella se encargaría de repartir por los parabrisas de los vehículos aparcados en la zona los pasquines en los que se anuncian sus servicios: "Tarotista y vidente con gran experiencia echa las cartas del tarot en persona".
El Tribunal Superior de Justicia de Galicia (TSXG) y el Consejo General del Poder Judicial han abierto ya un expediente informativo, un proceso que se inició a principios de mes con un informe remitido desde Lugo al TSXG, que además de comenzar su investigación, trasladó el asunto al Consejo General del Poder Judicial
María Jesús García es la encargada de gestionar los permisos de libertad de más de mil internos e internas de tres cárceles de Lugo y Ourense. En los últimos años había sido ya muy comentado el hecho de que se hiciera acompañar por un gato en sus vistas, y había recibido quejas igualmente por fumar en los juicios.